sábado, 26 de septiembre de 2015

Kaley Cuoco y Ryan Sweeting se divorcian

Otra pareja hollywoodense es víctima de la ola de separaciones… 
 Luego de dos años de matrimonio, esta adorable pareja se une al club de relaciones rotas de 2015. Según publica la revista People, Kaley y Ryan tomaron la mutua decisión de ponerle fin a su relación. “Ambos piden privacidad en este delicado momento, y no se publicará más al respecto en un futuro cercano”, reporta la publicación. La estrella de The Big Bang Theory y el tenista contrajeron nupcias en diciembre de 2013, y los rumores sobre su separación ya se hacían sentir desde principios de este año. Aunque en ese entonces, la estrella de TV lograra ocultarlos con unas románticas publicaciones en su Instagram. “Nunca he estado más orgullosa de nadie en este planeta. Este hombre le ha hecho frente a una avalancha de rumores y comentarios hirientes acerca de nuestra relación o cualquier decisión que ambos tomemos”, publicaba Kaley en la red social, en abril de este año. Ese post, y muchos otros relativos a Ryan han sido borrados de su perfil. Y mientras que la actriz no ha hecho ninguna mención directa a esta ruptura en sus redes; una publicación junto a un cachorro y una copa de vino, enunciada por el #Ánimos, nos deja intuir un cierto despecho. “Hace un año me casé con una persona que realmente cambió mi vida. Ryan, eres amable, gentil, paciente, generoso.. y la creación más adorable en este planeta. Eres mi todo. Feliz primer aniversario, amor”. Escribía Cuoco para celebrar su primer año de casada. La pareja se casó en año nuevo, en un rancho a las afueras de Los Angeles. La rubia llevó un vestido rosa, diseñado por Vera Wang, y repleto de detalles en encaje a ese tono. El atuendo ideal para esa ocación a la que Kaley llamó “su mejor noche”. “Lo admito, fue muy rápido, pero así soy yo”, declaraba la actriz para la revista Cosmopolitan en abril de 2014, cuando les hablaba de su veloz compromiso, a sólo tres meses de empezar su relación. “Me sentía como una estrella de rock. Lo increíble de esa escena es que estuvo llena de amor. Nunca había visto nada igual y fue exactamente como soñé que fuera, la octava maravilla, la mejor boda del mundo”.


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