DiCaprio quiere su OSCAR

Leonardo DiCaprio es el actor que más desea un Oscar y para la edición de 2016 va con dos oportunidades para lograr, al fin, la ansiada estatuilla.

Lo quiere y se lo merece, añadiré. Leonardo DiCaprio es, probablemente, el actor de su generación que más méritos ha hecho por tener una estatuilla dorada en propiedad. De hecho, ha estado nominado cuatro veces por 'A quién ama Gilbert Grape', 'El aviador', 'Diamante de sangre' y 'El lobo de Wall Street'. Y siempre se ha ido a casa de vacío.

También ha protagonizado cintas por las que podría haber rascado una nominación sin despeinarse demasiado como 'Titanic' (le pese a quien le pese), 'Infiltrados', 'Revolutionary road', 'Django Desencadenado' y hasta el 'Gran Gatsby' (puede que la peli fuera un gran chasco, pero él, como siempre, estaba inmenso).

Y precisamente por eso, Leonardo DiCaprio es también el actor más hambriento de Oscar con residencia en Hollywood. De hecho, no estampa su firma en ningún proyecto a no ser que la cinta en cuestión sea carne de 'award season'. Este año volverá a intentarlo con 'El renacido', de Alejandro González Iñárritu, y a juzgar por el impresionante tráiler (y el inicio de la película que pude ver en el estudio de Iñárritu hace algunas semanas en exclusiva) ésta podría ser sin duda la definitiva.

La película cuenta la historia de Hugh Glass, un trampero del siglo XIX al que sus compañeros abandonan en el bosque después de ser atacado por un oso. Entre DiCaprio, Iñárritu y la cinematografía del genio Emmanuel Lubezki promete ser una de las películas del año. Y un jugoso cebo para los académicos.

Pero por si este año la cosa también se tuerce, Leonardo DiCaprio tiene un as preparado en la manga. Y es uno de los buenos. El actor volverá a rodar a las órdenes de Martin Scorsese en la adaptación de 'The devil in the white city'. Dará vida a H.H. Holmes.

Holmes, conocido por ser el primer asesino en serie de América, confesó 27 asesinatos, pero se sospecha que pudo llegar a matar a más de 200 personas a finales del siglo XIX. Holmes no era un asesino en serie cualquiera, sino un psicópata en toda regla, que construyó un hotel de tres plantas en Chicago con el único objetivo de asesinar allí sus víctimas. Era especialmente sádico (el hotel tenía una cámara de gas) y una vez terminada la faena solía vender los esqueletos de sus víctimas a escuelas de medicina.

Solamente sobre el papel, este personaje también 'apesta' a Oscar. Eso sí, para ello Leonardo DiCaprio también tendrá que prestarse a la campaña publicitaria por la que cualquier aspirante tiene que peregrinar antes de subirse al escenario a recoger la dichosa estatuilla. Y él siempre ha sido algo tímido y esquivo para esas cosas.

Otra posibilidad es que a Leonardo DiCaprio esto del Oscar le dé igual y solo quiera hacer buenas películas. De cualquier modo, se merece su Oscar y lo tendrá. Más pronto que tarde.